Un compartimento cualquiera

**Enya Edelweiss** Jue Jul 23, 2009 3:56 pm

Enya entra en el compartimento llevando a su increíble boa albina en los hombros, su baul llega flotando detrás de ella y sube solito al portaequipajes. La joven deja la serpiente en uno de los asientos y ella se sienta delante. Apoya la cabeza en el cristal y se queda dormida enseguida: esa mañana se ha despertado muy pronto sin razón aparente y está que no se aguanta en pie. Deleela, la serpiente, se ha dormido también. Viéndolas así nadie diría que la especialidad de Enya son los hechizos de tortura y que uno de los abrazos de Deleela puede ser mortal.
La temperatura del compartimento es agradable y, en contra de toda expectativa debido a su carácter, el cuerpo de Enya desprende un dulce aroma a vainilla y coco. Respira pausadamente y sincronizada con la respiración de Deleela. Sigilosamente, la puerta del compartimento se abre, alguien entra por ella sin hacer ruido y se queda mirando a Enya mientras ella duerme.
Como si lo hubiera notado, abre los ojos y mira a la otra persona con expresión adormilada.
- Buenos días... esto... tú

**Nana.Wilder** Jue Jul 23, 2009 5:32 pm

-Buenos días... esto... tú... te recuerdo del año pasado -sonríe con timidez y algo sonrojada- perdona el atrevimiento... pero me pareces apasionante.
La había visto varias veces por el instituto, y había algo en ella que la hacía del todo... ¿flipante? Derrepente se fijó en la serpiente. Nunca había visto a una tan grande y mucho menos albina. Empezó a examinar sus recuerdos para saber si las serpientes tan grandes comian también ratones, pero la respuesta no llegó.
-Emm... ¿come ratones?

**Enya Edelweiss** Jue Jul 23, 2009 11:45 pm

- ¿Quién?¿Deleela o yo?
- Esto...
- Yo no, Deleela solo cuando el susodicho ratón es muy molesto -Enya bosteza e invita con un gesto a Nana a que se siente a su lado- La verdad es que no sé qué parte de mí te parece "flipante". Ni siquiera puedo conservar una pareja durante más de tres meses... y lo peor no es eso... siempre se matan por mi culpa o los mato sin querer
Enya se despereza. Un par de chocolatinas y un conejo vivo. Las chocolatinas descienden directas a las manos de las chicas mientras el conejo culebrea e intenta huir corriendo desesperado por el aire sin moverse. Deleela abre sus diminutos ojitos rojos y una chispa de salvajismo aflora a ellos mientras espera que su dueña le alcance la comida. Nana se ha quedado con la chocolatina a medio camino de la boca cuando ha visto que Enya sonreía.
- Come tranquila: Deleela es muy limpia, un abrazo y ni sangre ni nada, las serpientes son animales muy higiénicos

**William Archeraux** Vie Jul 24, 2009 12:21 am

William habia pasado varias veces por los pasillos del Tren en busca de un compartimento vacío o que al menos tuviese un sitio, al parecer todos los compartimentos iban demasiado llenos y en el fondo aquello agobiaba un poco al muchacho. Le pareció ver por el cristal un compartimento más o menos vacío, quizá un par de personas dentro y abrió la puerta con algo de duda encontrandose a una mujer con alas a la espalda de apariencia prepotente e imponente y a una chica, posiblemente de su edad.
- Perdonad... ¿Puedo quedarme aqui? Los demás compartimentos están llenos - Explicó con una media sonrisa rascándose la nuca.

**Nana.Wilder** Vie Jul 24, 2009 9:04 am

La respuesta de esa chica no contribuyó a que se calmara, dejó la chocolatina y cogió inmediatamente a Cacahuet que aún reposaba en su cabeza y lo escondió en su bolsillo. Y quizá esa serpiente la hacía sufrir más que el gato de Amy o el buho de su hermano, pero solo hacía que viera a la persona que tenía delante aun más interesante. ¿Cómo era posible que no entendiera por qué la veía tan flipante si era capaz de matar? Y es que Nana no entendía muy bien el concepto de muerte, no le daba tanta importancia como se le debe dar ya que nunca había tenido contacto con ella. Quizá si su vida le hubiera enseñado lo que era eso esa chica no le parecería tan interesante.
Aún tenía el miedo metido en el cuerpo cuando la puerta se abrió, casi dio un bote del susto pero intentó disimularlo cogiendo de nuevo la chocolatina ofrecida. Miró al chico que acababa de entrar, debía tener más o menos su edad, pero no le sonaba y a ella no se le olvidaban fácilmente las caras, aunque solo las hubiera visto un par de veces.
Se limitó a observarlo de arriba a abajo, sin sacar la mano de su bolsillo calmando a su ratón ya que este había intuido que algún peligro se hallaba fuera y esperó a que la chica respondiera a la pregunta del chico.

**Enya Edelweiss** Vie Jul 24, 2009 11:23 am

Enya miró al chico nuevo de arriba a abajo mientras Deleela conseguía al fin abrazar a su presa. Era el típico chico mono que encima sabe que lo es y se lo tiene muy creído... el típico tipo de persona que Deleela y ella aborrecían. La serpiente ya se había tragado al conejo entero y parecía sonreir satisfecha.
- Si Deleela te deja sentar, por mí no hay problema -Enya le dio un mordisco a su chocolatina mientras otra bajaba del baul directa a las manos de William- Bueno, no voy a consentir que me llaméis tú: me llamo Enya Edelweiss.
- ¿Alumna?
- No, okupa. Voy a pedirle a las directoras si puedo dar alguna clase... creo que Transformaciones me pega bastante... -Deleela sisea y se aparta un poco para que el chico pueda sentarse-. Y vuestros nombres?
Mientras los otros okupantes miran con aprensión a Deleela, para Enya parece ser tan normal que ni siquiera le presta atención. Vuelve a bostezar y hace crugir todas las articulaciones. Otra chocolatina baja hasta sus manos como si tal cosa.

**Nana.Wilder** Vie Jul 24, 2009 11:45 am

-Yo me llamo Nana... Nana Wilder -la miró a los ojos, tenía la necesidad de saber más de esa persona. Tenía que hacerle preguntas, miles de preguntas, en su caso no le servía preguntarle a las paredes de roca fría toda su historia... Eso no podría satisfacer su curiosidad- Enya, ¿puedo hacerte alguna pregunta? -volvió a sonreír, tenía ganas de escuchar un "sí, claro" y sino seguramente le daría lo mismo, las haría igual.

**William Archeraux** Vie Jul 24, 2009 11:51 am

Dió paso al frente entrando en el compartimento y escuchando como la puerta volvía a cerrarse sola, mirando a la mujer que se había presentado como Enya, o al parecer, señorita Edelweiss, al tiempo que cogía una chocolatía que le vino directamente a las manos y agradeció con una sonrisa y un "muchas gracias" algo silenciado. Contempló durante un instante la hermosa boa albina hacerse a un lado dejándole sitio y así pues se sentó, algo incomodado la verdad por la fría mirada del reptil. Al tiempo que escuchó lo de las transformaciones sonrió para si, aquella era una de las asignaturas que más le gustaban y sin duda se le daba bien, no como algunas otras. Examinó con la mirada a Nana, que acababa de presentarse y aquello mismo hizo él.
- Yo soy William Archeraux - Se presentó con una media sonrisa aún decorando su rostro.
Parecía que Nana y la mujer se conocían, un poco por la conversación, quizás se lo dijese la intuición, pero por eso exactamente, eligió mantenerse callado, aquello parecía casi una conversación privada, así que volvió la vista a la serpiente... aunque le causaba cierta curiosidad.

**Enya Edelweiss** Vie Jul 24, 2009 1:15 pm

- Bonito nombre... Claro, Nana, no te cortes... -Otra chocolatina baja a las manos de Nana, Deleela vuelve a dormir- Si te apetece algo que no sean chocolatinas avisa, mi baul está obsesionado con ellas... William, deja de mirarme como a una vieja, solo tengo 17 años.
Enya parece ya algo más despierta y comienza a sentir ganas de hablar por los codos

**Nana.Wilder** Vie Jul 24, 2009 1:36 pm

Sonrió, ahora que ya tenía su permiso podía preguntar lo que quisiera, no podía cortarse, era una orden de su futura profesora... Miró la chocolatina sonriendo y le dio un mordisco.
-Me gusta el chocolate... -la miró con una gran sonrisa, quizá algo tímida- ¿Donde naciste? ¿Como son tus padres? ¿Tienes hermanos? ¿Donde creciste? ¿Donde encontraste a la serpiente? ¿Donde aprendiste toda esta magia? Mi hermano tiene la misma edad que tú y no creo que esté capacitado para hacer de profesor... -se rio entre dientes al imaginarse a su hermano de profesor- Y la más importante... ¿eres feliz?
En verdad no sabía por qué había preguntado todo eso, en realidad le daba igual, ella lo que quería era hablar con Enya y aberiguar sus secretos, estaba convencida de que tenía muchos... Era evidente. Pero no sabía como hacer para que le contara lo que quería saber, y es que ni siquiera sabía lo que quería saber... Pero lo iba a conseguir, ¿por qué no debería conseguirlo?

**Enya Edelweiss** Vie Jul 24, 2009 1:53 pm

- Vaya, cuantas preguntas seguidas... A ver... Nací en Barcelona, mis padres son algo raros... por ejemplo, no todos tienen hijos con capacidad para abrir unas alas de cuchillas... tengo un hermano que se llama Johan y trabaja en Hogsmade, tiene 24 años. Me crié en la escuela de magia Hogwarts hasta que me cansé y vine de okupa en el despacho de la directora. A Deleela la encontré en el bosque negro de Hogwarts cuando iba como animaga... sí, me transformo en serpiente de cascabel. Mi magia la he desarrollado yo mism ainventando hechizos de tortura y creo estar capacitada para ser profesora por el mero hecho de que con 17 años ya he vivido más experiencias que muchos cuarentones... Creo que soy bastante feliz, me falta un chico a mi lado, un chico fuerte y con carácter, pero dentro de lo que cabe soy feliz.
Enya toma aire, casi se ahoga al contestar todas las preguntas del tirón. De no ser por el extremadamente poco carácter que aparentaba Will, lo mismo hasta se planteaba ligar con el muchacho, que pareciera un engrido no quitaba que fuera mono. Una bolsa de ositos de gominola baja hasta las manos de Will, que no le quita ojo de encima a Deleela.
- Si la miras tan fijamente la despertarás y tiene muy mal genio

**Nana.Wilder** Vie Jul 24, 2009 2:08 pm

Sonrió al ver que contestaba a todas las preguntas. Y más si le decía que era feliz, la mayoría de gente pone excusas tontas para decír que no lo es y quizá así dar pena y que los demás esten por ellos. La vida no es perfecta y eso todos lo sabemos.
Derrepente se dio cuenta de algo, quizá no muy rellevante, pero le hizo recordar su niñez en Alemania, cosa que hacía tiempo que no hacía.
-Johan es un nombre alemán, ¿tus padres no eran de Barcelona?

**Enya Edelweiss** Vie Jul 24, 2009 5:28 pm

- Otra de las rarezas de mis padres: los nombres de sus hijos... Para mi hermano fue el primer nombre que oyeron en la tele, en mi caso sonaba un CD de Enya... imagina que hubiera estado sonando un CD de Elvis... mejor no pensarlo...
Enya se muestra simpática, abierta y dicharachera. No hace preguntas, solo contesta o aborda un tema banal tras otro. Parece bastante entendida en la saga Final Fantasy y declara que le gusta escribir historias sobre muggles. Lo que Nana y Will no imaginan es que internamente Enya está recopilando información sobre ellos para futuros personajes. William permanece bastante callado, como si tuviera vergüenza por no haber visto antes a Enya, por no conocerla... Bueno, y que parece intimidado por las alas de cuchillas que ha mencionado Enya antes.
Un pastel de crema y chocolate baja desde el baul hasta las manos de Enya, la chica mira a su equipaje minetras se pone en pie.
- Oye, ya vale! Nos van a salir caries! -El baul se abre y se cierra solo varias veces- Así me gusta, que nos entendamos. -Enya se pone contra la ventana y un brillo asesino aflora a sus ojos cuando despliega unas alas de cuchillos que le rasgan la camiseta. Arranca de ellas un cuchillo y cuando las cierra vuelve a desaparecer el brillo ese tan inquietante. Se sienta al lado de Nana otra vez.- ¿Queréis pastel? Lo metí antes de salir, aún estaba calentito.
- Enya, esas alas...
- Es la pequeña mutación genética que sufrimos mi hermano y yo. Puedo contagiarlas si mi sangre se mezcla con la sangre del que va a ser contagiado, pero para el otro es un proceso bastante doloroso ya que debo pegarle un tajo con estas cuchillas y... no es muy agradable. Pero bueno, queréis pastel?
- Señorita Edelweiss...
- Enya, llámame Enya.
- Pues Enya, tu camiseta se ha roto con... las alas.
- Tranquilo, no vas a verme el sujetador, tengo tan poco pecho que ni me molesto en llevar -Lo dice sin ponerse colorada, como si fuera lo más normal del mundo. Le da la espalda a William dejando al descubierto que solo la camiseta se ha rodo, la alas están tan perfectamente escondidas que apenas se detecta otra cosa que unos pequeños tatuajes en forma de alas enmedio del desgarro- ¿Ves? Ni alas ni sujetador, ventajas de tener poco pecho, la directora Ereb no puede hacerlo porque tiene una gran pechonalidad.
Vuelve a sentarse delante de William y se pone a cortar el pastel como si nada, sin avergonzarse de que el chico sepa que no lleva sujetador... puede hacer eso porque no lo ve como un potencial acosador ni como una persona con la que vaya a trabar una relación muy estrecha, de hecho cree que van a chocar bastante por su carácter abierto y el del chico, que parece algo retraído.

**Nana.Wilder** Sáb Jul 25, 2009 7:30 pm

Se quedó alucinada cuando vio esas enormes alas de cuchillas desplegadas. Alucinada y con la respiración cortada. Se rió entre dientes al ver como se quedaba con ese chico al mostrarle la camiseta rota por las alas y tomó un trozo del pastel recién cortado con una de esas cuchillas. Era riquísimo, casi tanto como las tartas de su madre que tanto había deseado en llevar en su baúl y que nadie le había dejado, ¿por qué no si Enya también llevaba dulces en el suyo? No era justo…
-Esto… Enya, ¿Cuál sería tu forma de dar clase? –preguntó deseosa de saber si sería una profesora aburrida y sería más, cosa que dudaba hasta más no poder.

**Enya Edelweiss** Dom Jul 26, 2009 2:08 am

- Si esperabas que fuera repartiendo mis alas malditas a diestro y siniestro, quítatelo de la cabeza y póntelo en los pies: no es mi estilo. Os enseñaré transformaciones curiosas, a veces daré la clase a media con Deleela porque soy animaga y... bueno, intentaré traer a alguna colega metamorfomaga... espero que mis clases no sean pesadas, porque la verdad es que es la primera vez que hago de profesora...
Enya sonríe con cara de circunstancias, una sonrisa que hace que parezca encantadora aun habiendo dejado vislumbrar el brillo asesino de sus ojos con las alas. Suspira y saca un círculo de hilo del bolsillo, se pone a hacer figuras con él y le pide ayuda a Nana ya que necesita de cuatro manos para hacer algunas figuras, ríe como una loca cada vez que por alguna razón se le deshace lo que tenía y entonces cambia de ayudante y le pide ayuda a William. Todo lo agresiva que ha parecido cuando ha desplegado las alas se ha escondido detrás de un círculo de hilo.
- Nana, ráscame la espalda, por favor, es que me pican las alas... tienes que rascar los tatuajes, ya no hay camiseta en esa parte, así que lo tienes fácil. Se lo pediría al chavalín si no fuera a morirse de vergüenza... lo siento, nene, pero se te ve más cortado que la leche caducada

**William Archeraux** Lun Jul 27, 2009 2:04 am

Se había quedado completamrente sumido en sus pensamientos tras que Enya le dijese que no mirase fijamente a la serpiente dormida, sin embargo una parte de su subconsciente había estado atento de la conversación, aunque algunas pastes tenian algunas pequeñas lagunas ¿Por que estaba tan distraido? Generalmente él solía estar muy despierto. Ni el propio William habría sabido responder a aquello, tal vez se encontraba cansado o quien sabe, tenía algunois pensamientos ocultos que él mismo intentaba descubrir.
Al recibir la bolsa de gominolas había guardado la chocolatina para luego y se había dedicado a abrir las gominolas e irse comiendo la bolsa lentamente, despacito y con buena letra,ero por fin, consiguió salir de todo aquel ensimismamiento al escuchar una referencia muy clara a él y algo de picar alas y rascar espalda...
- No, no, cortado para nada es que... pensaba - Dijo sacudiendo la cabeza para salir por completo de aque estado.
A decir verdad Enya le causaba un gran interés y Nana parecía una chica muy simpática, sin duda quel sitio iba a ser un buen lugar donde pasar un curso más antes de volver a trasladarse posiblemente... quizá fuese en eso donde tenía los pensamientos.

**Enya Edelweiss** Lun Jul 27, 2009 2:39 pm

- Me alegro, me ponen nerviosa las personas tímidas en exceso -Enya le guiña un ojo con simpatía. Sigue jugando con el hilo hasta que consigue hacer una Torre Eiffel. Se la muestra a William y a Nana de lo más ilusionada.- Me enseñó una primita mía a jugar con hilos, es un buen pasatiempo y ocupa poco.
Se sienta en pose india en el asiento. De rtepente, Deleela comienza a toser y vomita un pelaje y unos huesos, vuelve a dormirse casi al instante. William y Nana la miran medio asqueados mientras Enya sigue jugando con el círculo de hilo. Curiosamente, no huele a vómito, tan solo se ve brillante por la saliva de la serpiente. Enya consigue hacer una mariposa y tras enseñársela a los compañeros de compartimiento, le da un par de golpecitos a su baul y una bolsa sale de él, recoge los desperdicios de la comida de Deleela e implosiona ante las miradas atónitas de Will y Nana. Sin previo aviso, Enya le da a Nana un beso en la mejilla y la chica se aparta de golpe.
- Eh, que no es el beso de la mafia, que lo he hecho porque me caes bien! -Se dirije a William- Tú aún tienes que ganarte mi simpatía como para que te dé un beso, como no hablas casi... ¿Te da vergüenza que no lleve sujetador? Porque si es eso, te das la vuelta y me pongo uno, por mí no hay problema.
Lo dice como si fuera lo más normal del mundo y se encoje de hombros esperando la respuesta de William.

**William Archeraux** Lun Jul 27, 2009 3:12 pm

Sonrió al escuchar su opinión sobre la timidez y se quedó observando lo que hacía con el hilo, en un principio no se imaginaba nada fuera de lo común que se puede hacer con un hilo pero al ver aquella torre Eiffel tam bien hecha se quedó impresionado, la verdad es que parecía ser un buen pasatiempo.
- Yo soy más de polvos dela ilusión, me gusta fabricarlos con sus distintos colores y juegos de espejismo, alterar la realidad con cosas irreales es... curioso supongo - Dijo con una media sonrisa al tiempo que escuchaba un ruido cerca de él.
Se volvió a ver que era y resultó ser la serpiente... prefirió no mirar a los restos, aunque estuviese acostumbrado aque los animales expulsasen así los restos de sus comidas aquello aún le resultaba un poco asqueroso, pero pronto volvió la vista de nuevo en Enya para ver como se apartaba Nana y rió por lo bajo, para sonrojarse un poco al escuchar lo que decia.
- No, no, cada cual es libre y lo primero es la comodidad del individuo ¿no? - Dijo sintiendo que los colores desaparecian de sus mejillas poco a poco.

**Nana.Wilder** Lun Jul 27, 2009 9:41 pm

Mientras miraba esas impresionantes figuritas de hilo escuchaba la conversación de sus dos compañeros. Miró a William con rapidez cuando habló de polvos de la ilusión. Estaba de acuerdo en que podían resultar muy últiles en depende qué situaciones, pero como diversión... ¿Para qué cambiar la realidad? Es perfecta en su armonía... ¿Por qué los humanos se molestan en aprender cambiar la realidad si ni siquiera saben lo que es la realidad? No saben lo que es real, lo que realmente existe, no conocen la realidad de todos los que les rodean... ¿Para qué cambiarla si cuando la descubres es mucho más apasionante que una falsa, vaga y común ilusión?
Estaba sumergida en esos pensamientos cuando de repente Enya le dió un beso, se asustó, ya se imaginaba a la serpiente lanzándose encima suyo a por su ratoncito, pero sonrió al escuchar el comentario de la mafia.
-Oye Enya... ¿tú qué sabes de la muerte? -la pregunta podía parecer muy amplia o muy concreta, pero es que en realidad ni Nana misma sabía a qué se refería realmente con esa pregunta, quizá quería saber las respuestas a todos los significados de esa pregunta- Quiero decir... ¿cuantas veces la has presenciado? ¿qué sientes? ¿has estado a punto de caer? ¿es triste? ¿qué es la muerte en sí y por qué hay distintas versiones u opiniones de ella?

**Enya Edelweiss** Mar Jul 28, 2009 12:30 am

- Nunca se sabe nada de la muerte, hay miles de maneras de causarla o de encontrarla. Puedes causarla aposta o no. Creo que no puedo contar todas las veces que la he presenciado ya que a menudo la muerte era yo, al principio me asqueaba y me horripilaba la idea de poder llegar a matar, con el paso del tiempo me he acostumbrado demasiado a ella y ya es casi como si no sintiera nada. Sobre si es triste... supongo que hay varios factores que lo determinan.
- ¿Qué?
- Imagina el caso de una familia MUY cristiana, pero una cosa exagerada. Se muere el abuelo de esa familia. Enseguida ves a la familia llorando a cántaros pero no piensan que según su creencia esa persona está en el cielo. Para ellos es una tragedia, pero para alguien ajeno como seríamos cualquiera de nosotros? Debiera afectarnos que ese desconocido haya muerto? Ya te lo he dicho, hay muchos factores que determinan una cosa o la otra. La muerte en sí no tiene una definición concreta, muerte es muchas cosas y todo muere ¿Creías que las manzanas cuando te las comes siguen vivas? Pues no... -Enya se ha quedado medio taciturna, como meditando sus propias palabras- Por ejemplo... -De repente, William no se puede mover y sin que nadie los vea los tatuajes de la espalda de Enya se han expandido un poco. La chica mueve el dedo corazón de la mano izquierda y el muchacho se apunta su propia garganta. A medida que Enya cierra el dedo, la varita de William se le va apretando contra la vena aorta del cuello del muchacho. Enya se incorpora y le sopla en la cara. Todo ha vuelto a la normalidad y Enya se sienta en su sitio- De esto podéis sacar dos conclusiones: 1- No subestimes a los hilos, no solo se pueden hacer figuritas, también pueden usarse para hacer de marionetista -Enya les muestra los dedos de las manos, de los que cuelgan unos hilos transparentes- Y 2- La muerte se puede presentar de mil maneras distintas y de manos de cualquiera. Aún no conoces a William, Nana, si lo hubiera matado, habrías llorado? Te hubieras sentido triste? -Enya se transforma en serpiente de cascabel, sacude la cola y vuelve a transformarse en persona- También puedo matar de un solo mordisco. Pero tranquilos, no voy a mataros -William y Nana se habían apartado visiblemente de ella y Deleela. La sonrisa de Enya es tranquilizadora y poco a poco logra aplacar el primer susto- Estoy intentando no matar, si lo hago, las directoras no me van a dejar dar clase en el colegio y... bueno, me caéis bien, de momento... -Enya se incorpora y le da a William un beso en la frente- El mero hecho de no haber salido por patas cuando te he utilizado de marioneta ya dice mucho a tu favor... y en el de tu valentía...

**Nana.Wilder** Mar Jul 28, 2009 9:44 pm

Al pensar en lo que acababa de ocurrir se puro a reír. Tanto que casi le salían las lágrimas.
-La muerte se sobrevalora. “Todo tiene solución menos la muerte”, hay cosas peores que la muerte sin solución… Así que, ¿por qué tendría que llorar por qué mataras a William?-se había puesto más seria pero sin perder la sonrisa- Quizá algunos dirían “si ha matado a uno deberías temer por si te mata a ti”… Una tontería, ¿no crees? Si he sido feliz, si lo soy, ¿mejor morir antes de haber sabido lo que es la infelicidad, no? –volvió a reír- Aunque todo eso son tonterías…-se quedó pensando- Todo lo que digo o pregunto son tonterías…-sonrió de nuevo-Sigo siendo una niña de tres años que todo lo quiere saber…

**William Archeraux** Miér Jul 29, 2009 1:37 am

Escuchó atento la conversación sobre la muerte, el tenía una visión muy subjetiva de eso, por la profesión de sus padres lo veia de una manera posiblemente diferente a la forma ne quye lo verían Enya y Nana, pero de aqui que cada cual desarrolle sus definiciones dentro de la realidad y las multitudes realidades, pero en menos de un instante se vió dentro de la conversación, apuntandose con su propia varita, sin poder hacer nada al respecto, la sentía en su cuello y miraba a Enya que al poco rompió aquello y fue como si no hubiese pasado nada. Se frotó el cuello con lamano y se aclaró la garganta un par de veces. Al poco vió la transformación de Enya y aunque se apartó con cierto respeto, le llamó mucho la atención, él había comenzado sus estudios de animagia en Durmstrang y aunque no lo dominaba si había conseguido pequeños cambios, nunca tan perfectos como los de Enya, claro estaba, pero ya tenía la edad para examinarse de ello, y no podía evitar que la conversación le fuese nula ya que sus pensamientos se centraban en las transformaciones de Enya, era la asignatura que más le gustaba y la que mejor se le daba y aquello le encantaba, además, Enya eramuy guapa... aunque estaba un poco... era un poco psicópata pero ¿Quien no? Después escuchó las palabras de que intentaba no matar y no pudo evitar reir por aquello, tenía su parte de gracia y cuando sintió los labios de Enya en la frente, no pudo evitar tampoco el sonrojarse levemente y sonreir.
- Gracias - Dijo por el halago, aunque el corazón aún le latía con fuerza, hoy se encontraba poco hablador.

**Enya Edelweiss** Miér Jul 29, 2009 1:40 am

- Las personas curiosas son interesantes, me gusta intentar responder las preguntas complejas, es divertido... no sé si te consuela, pero a mí no me parece que digas tonterías.
Enya sonríe dejando esas palabras en el aire, del baul sale un té frío y va directo a sus manos. Una taza de chocolate caliente va a parar en las manos de Nana y otra en las de Will. Enya comienza a tomarse su bebida a sorbos pequeñitos, saboreando el té. Deleela se revuelve en sueños y Enya la mira sonriendo maternalmente. Nadie diría que esa chica puede matar y quedarse tan ancha.
- Tomaos el chocolate, os ayudará a pasar el susto de mi faceta asesina contenida... sobretodo a ti, William, de repente pareces un tomate...

**William Archeraux** Miér Jul 29, 2009 1:49 am

- Sí - Asintió
Con la taza de té en las manos mirando el chocolate y finalmente dando un par de sorbos, relamiendose luego lso restos del aquel dulce y caliente líquido de sabor exquisito.
- Es que no estoy aocstumbrado a que intenten asesinarme con mis propias manos - Dijo terminando aquello con una risa algo nerviosa - Por lo general llegan, arrasan, luchamos y huimos - Dijo despistándose un poco del trabajo de sus padres y de que aquello no era algo de lo que le permitieran hablar, sus padres poficialmente eran maestros - O eso imagino que se haría en el caso de que unos asesinos fuesen a por mi - Dijo rascándose la nuca y dando otro sorbo al chocolate.
- Enya... ¿Que opinas de la conciencia? - Dijo tras haber observado sus actos.

**Enya Edelweiss** Miér Jul 29, 2009 2:37 am

- Si pensara demasiado en ella, me hubiera pegado un tiro hace tiempo ya... Así que procuro no hacerlo, me sería... poco práctico -Enya observa detenidamente a William y sonríe de oreja a oreja al descubrir la mentira del chico- Si para asesinar eres tan bestia como has dicho, nunca harás un trabajo bien hecho, la víctima siempre se te escapará
- Hablas como si fueras una asesina...
- Bueno, no llego a tanto, pero algo sé de pulcritud y trabajo bien hecho. Es como si me transformara en serpiente de cascabel y me dejara un brazo puesto... no lo sé, la verdad es que la conciencia a mí hace tiempo que me ha dejado por imposible, ahora actúo por instinto o impulsos y luego no me remuerde nada... Nunca me cayó bien Pepito Grillo

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